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Conoce cómo funciona el Seguro de Responsabilidad Civil para empresas y contratistas

3 minutos de lectura

29 mayo de 2025

os personas de negocios, vestidas con trajes formales, trabajan juntas en una oficina moderna. Una de ellas sostiene una tableta mientras la otra señala la pantalla, ambos interactuando de manera colaborativa. En la mesa hay una computadora portátil, documentos con gráficos y un bolígrafo, sugiriendo una reunión o análisis de datos empresariales. Al fondo, se observa una pared de vidrio con patrones geométricos y luz natural entrando al espacio.

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¿Te imaginas que alguien se lastime en tu negocio o que durante una obra dañes una propiedad ajena? Estos son de esos imprevistos que nadie quiere vivir, pero que pueden pasar. Por eso existe el Seguro de Responsabilidad Civil (RC), para que no tengas que sacar del capital de tu empresa para cubrir daños a terceros si algo sale mal.

Existen distintos tipos de Responsabilidad Civil, y hoy ahondaremos en los principales que entregan coberturas a empresas: RC Actividades e Inmuebles y RC Contratista. Ambos son útiles y cubren situaciones diferentes. Acá te explicamos las diferencias para que elijas el que mejor se ajusta a tu negocio.

Seguro de RC Actividades e Inmuebles


Ideal para: negocios, empresas con oficinas, locales comerciales o espacios donde se reciben clientes o personas, ya sea en lugares fijos o en eventos.

Este seguro te cubre si, por ejemplo, alguien sufre un accidente dentro de tu establecimiento, o si algo que haces (como una reparación o una instalación) termina afectando a alguien más o a su propiedad.

¿Qué incluye?

  • Daños a terceros dentro y fuera del inmueble de tu negocio.
  • Problemas durante actividades como mantenimiento, remodelaciones, construcciones, etc.
  • Incidentes en bares, restaurantes, centros nocturnos, gimnasios, clínicas, piscinas, jardines, etc.
  • Eventos, ferias o exposiciones organizados por tu empresa.
  • Errores o accidentes causados por tu personal.
  • Daños durante carga y descarga (excepto en estacionamientos).
  • Gastos legales si te demandan (honorarios, fianzas, abogados).

  • Coberturas extra (dependiendo del plan):

    • Daños a vehículos en custodia (como valet parking).
    • Daños en instalaciones de seguridad o propaganda.
    • Actividades educativas, deportivas o recreativas.
  • RC Arrendatario (si rentas un local).
  • Daños patrimoniales (en el plan PyME).

  • ¿No te quedó claro? Te lo explico en corto: imagina que tienes tu negocio bien armado y, por algo fuera de tu control (como una falla eléctrica), terminas afectando a alguien y esta persona decide meterte una demanda. Si no tienes un seguro, tendrías que pagar, sacando dinero de tu empresa. Pero con el RC Actividades e Inmuebles, el seguro da la cara por ti y se encarga de cubrir los daños, lo que perdió la otra persona y todo lo legal que venga con eso. O sea, tú sigues enfocado en tu negocio, sin que ese problema te saque un dineral ni te deje en la ruina.

    Seguro de RC Contratista


    Ideal para: contratistas, subcontratistas o empresas que hacen obras de construcción, mantenimiento o remodelaciones en propiedades ajenas.

    Si tú o tu equipo hacen trabajos en otras ubicaciones (edificios, casas, calles), este seguro es el que necesitas. Protege en caso de que se dañe algo o alguien durante esas obras.

    ¿Qué incluye?

    • Daños a terceros durante trabajos como demolición, remodelación, mantenimiento o construcción.
    • Protección dentro o fuera del predio donde se trabaja.
    • Accidentes durante obras, ya sea que estés solo o en consorcio con otras empresas.
  • Daños a estructuras, bienes o personas causados por tu equipo.
  • Gastos legales por reclamos o demandas.
  • Cobertura para empleados en funciones.
  • Cobertura conforme al Código Civil Federal (Artículo 1913).

  • Coberturas extra útiles:

    • RC por trabajos terminados (en caso de que el daño ocurra después de haber finalizado la obra).
    • RC por contaminación ambiental.
    • RC por daños subterráneos o instalaciones ocultas.
  • RC por uso de maquinaria, apuntalamiento, soldadura o trabajos con alto riesgo.
  • RC arrendatario si también rentas un espacio como parte del proyecto.

  • ¿Te suena medio complicado? Te lo pongo fácil: si tú eres contratista o haces chamba en obras, sabes que cualquier descuido puede meterte en un buen lío. Si le haces daño a una persona o algo se rompe en una propiedad ajena, el seguro entra a ayudarte. No importa si fue un accidente, lo cubre todo: lo que se rompió, lo que tengas que pagar por lesiones y hasta el abogado si te quieren demandar. Así tú puedes seguir chambeando sin miedo de que un error te saque del juego.

    ¿Por qué contratar un RC?

    • Protege a tu empresa, tanto legal como económicamente, frente a accidentes que puedan afectar a terceros.
    • Ayuda a tu negocio a cumplir con la ley (¡sí, hay normativas que lo exigen!).
    • Aumenta la confianza de tus clientes y socios.
    • Puedes seguir trabajando con tranquilidad sin miedo a imprevistos costosos.

    Si quieres cotizar cualquiera de estos seguros, en Simplee lo hacemos fácil y rápido desde nuestra web. Además, nuestro equipo te acompaña en todo el proceso para que elijas el seguro que realmente necesita tu negocio, sin pagar de más.

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